Mientras el Poder Judicial acogió la denuncia de los tenedores de Bonos de Telefónica del Perú, que encabezados por la AFP Prima exige la anulación de la venta de las acciones de la empresa a la argentina Integra Tec de propiedad del peronista José Luis «El Chupete» Manzano, Indecopi un procedimiento concursal ordinario.
En el cuál, la decisión sobre el futuro de la empresa de telecomunicaciones pasa a la Junta de sus acreedores.. Indecopi, en este proceso, actúa más como un facilitador, pero la decisión final es de los acreedores, para lo cuál se publica una invitación para que cualquier persona o empresa que considere que Telefónica le debe se presente para ser reconocidos como acreedor. Una vez cumplido este paso «se instala una junta de acreedores, que reemplaza a la justa de accionistas, que decidirá si la compañía se reestructura o se liquida».
Respecto a los plazos, se preve una serie de tiras y aflojas entre el nuevo dueño que tratará de obtener la presidencia de esta Junta y los acreedores maoritarios que son la SUNAt y los bonistas, que estirarán los plazos establecidos por ley. La clave es, si Telefónica logrará mantener la importante presencia que mantiene en el mercado peruano.
Si los acreedores optan por una reestructuración y no por la liquidación no debería pasar nada con el servicio que presta a sus usuarios. No obstante, si se deciden liquidarla, se tendrá que vender a privados por segmentos los servicios que atiende la empresa.




