Ucrania apunta a la joya de la corona de las refinerías rusas.
Ucrania apunta a la joya de la corona de las refinerías rusas: el ataque
que temen EEUU y el mercado de petróleo EEUU ha pedido a Ucrania que detenga
los ataques a la infraestructura rusa El precio del petróleo y los refinados
han reaccionado con subidas notables El ataque a la refinería de Kirishi
sacudiría con violencia el mercado de petróleo Ucrania está torpedeando la
capacidad de refino de Rusia con los ataques masivos de drones en territorio
ruso. Tal ha sido el impacto que hasta EEUU ha pedido a su aliado que detenga
este tipo de ataques que amenazan la estabilidad mundial del mercado de petróleo
y de productos refinados (Rusia es una de las mayores 'refinerías' del mundo).
Pese a todo, es posible que el mercado de combustibles y de crudo aún no haya
visto lo 'peor'. Ucrania tiene en el punto de mira una refinería que es una de
las joyas de la corona de la industria rusa y que, de ser atacada e inutilizada,
podría desencadenar un auténtico seísmo en el mercado.
Hasta la fecha, el petróleo ha subido con intensidad, pero sin 'romper' nada.
El crudo Brent se ha revalorizado alrededor de un 15% en las últimas semanas y
ha tocado máximos de los últimos seis meses, mientras que los cracks spread (la
diferencia de precio entre un barril de diésel o gasolina y otro de petróleo)
también ha aumentado, pero sin llegar a alcanzar los niveles críticos del verano
de 2022, cuando la escasez de diésel hizo saltar todas las alarmas en
Europa.
Se puede decir que, por ahora, el mercado petrolero y de derivados solo ha
mostrado una reacción modesta a los ataques con drones. Sin embargo, todo podría
cambiar si los drones ucranianos lograran dejar fuera de servicio a la
importante refinería de la ciudad de Kirishi, en el óblast de Leningrado, a unos
115 kilómetros de San Petersburgo, es decir, del acceso al Mar Báltico. Se trata
de la refinería Kirishinefteorgsintez (KINEF) de la compañía Surgutneftegaz.
ver más La 'ratonera' de los fijos discontinuos y el paro: un laberinto
en el que hasta Díaz se pierde En la oleada de ataques de la última semana,
los drones ucranianos han percutido en repetidas ocasiones contra esta planta,
pero no han conseguido dañarla. El gobernador de la región de Leningrado,
Alexander Drozdenko, declaró el martes que un dron ucraniano había sido
destruido en las afueras de Kirishi. Los analistas inciden en la importancia de
esta refinería y la persistencia de Kiev en atacarla lo confirma.
La refinería de Kirishi es una de las dos principales de Rusia y la única
destacada en el noroeste del país. Refina unos 17,7 millones de toneladas
anuales (355.000 barriles diarios) de crudo ruso, es decir, el 6,4% del total,
según datos de fuentes del sector recogidos por Reuters. No obstante, otros
datos, como los compilados por Bloomberg, elevan su capacidad diaria de refinado
a 420.000 barriles. Otras métricas hablan de una capacidad anual de hasta 21
toneladas. Asimismo, amplían los datos de Reuters, produce unos 2,3 millones de
toneladas de gasolina -el 5,3% del total de Rusia-, el 7,6% de gasóleo, el 16,3%
de fuelóleo y el 3,4% del combustible de aviación del país, según fuentes del
sector.
La producción de diésel en Kirishi Pero el dato que causa más alarma es el
de su producción de 150.000 barriles al día de diésel, destinado principalmente
a la exportación. Una cantidad nada desdeñable que los ataques ucranianos
podrían eliminar potencialmente del mercado. Los expertos coinciden en que los
mercados del crudo y derivados podrían experimentar gran volatilidad y
nerviosismo si Kiev vuelve a apuntar a las principales terminales de exportación
de petróleo de Rusia en el Mar Báltico o Negro. En el caso de la refinería de
Kirishi, se antoja crucial su proximidad al oleoducto y al puerto de Primorsk.
Cualquier interrupción en su producción tendría un impacto en el mercado,
alertan los analistas del sector.
"Si Ucrania quisiera intensificar su presión sobre los ingresos rusos por
refinado de petróleo, apuntaría a la infraestructura clave de las terminales de
exportación de productos en los puertos de Primorsk o Novorossiysk", afirma Mark
Williams, director de investigación de petróleos a corto plazo de la consultora
Wood Mackenzie. "No obstante, eso presionaría aún más la relación con sus
aliados occidentales, ya que el impacto en los precios mundiales del petróleo y
los productos refinados sería sustancial".
Tras la llamada de EEUU a detener los ataques y, a tenor de los propios
intereses de Ucrania (mantener de su lado y con gran implicación a EEUU), podría
parecer difícil que se produzca este ataque. Sin embargo, la realidad dice otra
cosa bien diferente. Kiev ya ha apuntado a esta refinería y le costará renunciar
a un objetivo tan 'goloso'.
Además, altos funcionarios ucranianos han defendido en los últimos días los
ataques de Kiev a la infraestructura petrolera en lo profundo del territorio
ruso. La viceprimera ministra, Olha Stefanishyna, ha señalado que las refinerías
en Rusia son objetivos legítimos que proporcionan recursos a la maquinaria de
guerra del presidente Vladímir Putin. "Entendemos las llamadas de los socios
estadounidenses", asegura Stefanishyna durante una mesa redonda en el Foro de
Seguridad de Kiev. "Al mismo tiempo, luchamos con las capacidades, recursos y
prácticas que tenemos hoy". Durante este fin de semana, los ataques ucranianos
han continuado. Un ataque con dron provocó un incendio en la refinería de
Kuibyshev, con una capacidad anual de siete millones de toneladas de petróleo,
ha informado el gobernador local Dmitry Azarov. Un segundo dron apuntó a la
cercana refinería de Novokuibyshevsk, pero fue rechazado sin causar ningún
daño.
Así, el riesgo sobre las refinerías rusas sigue siendo muy real: "A falta de
cualquier esperanza realista de alto el fuego o de paz, el atroz conflicto con
Ucrania y sus aliados continuará, al igual que las contramedidas ucranianas, que
últimamente han dañado con tanto éxito la industria petrolera rusa. Llegados a
este punto, es razonable resumir cómo se han visto afectadas las capacidades
rusas de refinado, ya que cabe esperar que ocurra lo mismo en un futuro
previsible", señala Tamas Varga, analista de PVM Oil.
El volumen de productos refinados cae "Cualquier régimen de ruido de
sables será siempre tan reservado como pueda serlo, y la transparencia nunca
será su modus operandi. No obstante, los datos procedentes de diversas fuentes
de los dos últimos meses indican que el sector ruso del refinado se ha visto
gravemente afectado, lo que ha repercutido en el volumen de productos
disponibles tanto a nivel nacional como internacional", añade Varga.
El consejero delegado de Gunvor cree que los ataques de drones ucranianos han
eliminado 600.000 barriles diarios de capacidad de refino, lo que dificulta las
exportaciones de destilados, han informado distintos medios. JP Morgan calcula
que los ataques reducen el funcionamiento de las refinerías rusas en unos
300.000 barriles al día, además del mantenimiento ya programado. "Aunque las
opiniones sobre el alcance de los problemas de las refinerías varían un poco, el
mensaje fundamental, en lo que respecta a las exportaciones, está claro. Los
envíos rusos de productos serán sustituidos, en cierta medida, por petróleo
crudo y esta alineación debería tener un impacto notable en los márgenes de
refino", cierra Varga.
La refinería de Kirishi se empezó a construir en 1961 en una zona devastada
por la II Guerra Mundial y los primeros productos petrolíferos se produjeron en
1966. A comienzos de los 70, la refinería ya era una de las cinco mayores de la
Unión Soviética. En 1980 se reconstruyó la planta y siete años más tarde se
fundó la subdivisión Kirishineftekhimexport de Kirishinefteorgsintez para
dirigir la actividad económica exterior de la empresa. En 1991 se convirtió en
una empresa estatal independiente, pero siguió comerciando para
Kirishinefteorgsintez. En 1993, la refinería pasó a formar parte de
Surgutneftegaz. Mario Becedas Vicente Nieves 6:00 - 25/03/2024 El
Economista.