En un escenario mundial e interno marcado por la incertidumbre y recibiendo
como herencia: inflación de 8.4%, crecimiento de 2.7% del PBI, subempleo de 76%
y con la inversión privada en picada, el ministro de Economía Alex Contreras
presentó el plan “Con Punche Perú” en las últimas horas de 2022. Con serenidad y
demostrando solvencia, Contreras presentó a su equipo en el MEF, recordando que
la confianza, que es vital para crecer económicamente, fue sensiblemente dañada
por el intento de golpe de Estado, razón para la creación de: “Con Punche Perú,
que es un plan de reactivación rápida”.
No es un secreto que el vandalismo azuzado luego del fallido golpe de estado
ha ocasionado un impacto negativo en transporte, turismo, comercio, minería y
agropecuario (limitaciones para trasladar insumos y menor demanda), que se
refleja en el PBI por expectativas (postergación de decisiones de inversión) y
recaudación (menor gasto público). El MEF calcula que el costo fue de alrededor
de mil millones, a razón de S/ 100 millones diarios, en los que el 80%
corresponde a las regiones.
Según el MEF “Con Punche Perú” presenta tres ejes: 1) Reactivación de la
economía familiar, 2) Reactivación regional y 3) Reactivación sectorial, que
implicarán un costo fiscal de S/ 5,900 millones expresadas en 19 medidas
normativas. “Se estima un impacto de 1.2% en el PBI del primer semestre a lo que
se agrega la creación de 130 mil puestos de trabajo… el objetivo es cerrar el
gobierno de transición con tasas de crecimiento de al menos 4%” (Ministro
Contreras 29/12/22).
Para reactivar la economía familiar, se ha anunciado una subvención
extraordinaria a favor de los usuarios de Juntos, Pensión 65 y Contigo, a un
costo de S/ 400 millones (1.4 millones de usuarios); S/ 100 millones para Ollas
Comunes y S/ 491 millones para ampliar la masificación del gas natural con 110
mil hogares adicionales. Para la reactivación regional, por primera vez se ha
dispuesto acompañar la renovación electoral de autoridades con el despliegue de
75 técnicos del MEF al interior del país: “van a ir y apoyar a los gobiernos
locales y regionales, porque la meta es que en el primer trimestre, al menos se
ejecute el 20% del presupuesto”. También se anunció un financiamiento de S/ 100
millones para poner a disposición de las municipalidades 2000 gerentes públicos
de Servir y no se limiten a contratar a los “compadres”, el financiamiento de
474 IOARR (inversiones de optimización) con un costo de S/ 731 millones para
obras de complejidad simple como una posta o una zanja, así como “financiamiento
adicional de mil millones a proyectos de inversión pública con expedientes
listos”. Además, un informe situacional de S/ 300 millones para reactivar 2624
obras paralizadas, impulsar el FIDT (Fondo Invierte para el Desarrollo
Territorial) con S/ 194 millones, asignar S/ 600 millones a proyectos
prioritarios (15 hospitales, 74 colegios, etc.).
Por si fuera poco, con la euforia que otorga la experiencia en el BCR y en el
MEF el ingeniero Contreras ha ofrecido el destrabe de proyectos mineros por US$
10,555 millones (Ampliación Toromocho US$ 2,883 millones, Sulfuros Yanacocha US$
2,500 millones, etc.), destrabar los proyectos de irrigación Chavimochic (US$
654 millones) y Majes Siguas II (US$ 715 millones) entre otras promesas.
Como se aprecia, un vuelco de 180 grados respecto a sus predecesores que
priorizaron la ideología y el conflicto antes que el desarrollo.