Gris es toda teoría, verde es el dólar y el árbol de la vida
Desde el Faro
Por: Rafael Hidalgo
¿Cómo encuentra esta primavera a los peruanos de la capital? Pues, al 67% de
limeños con ingresos menguados o estancados, que no esperan una mejora de su
situación económica en lo que resta del año, mientras los bienes esenciales han
subido al punto que el 37% llega con dificultad a fin de mes como señala un
informe de Impronta Research (21/9/22). Pero, todo indica que el entorno global
agravará esta situación, porque la Reserva Federal (Fed) -el banco central de
los EEUU- acaba de elevar la tasa de interés de referencia situándola en 3.25%,
además de anunciar que incrementará la tasa hasta bordear 4.6%, según su
presidente Jerome “Jay” Powell: “para devolver la inflación al 2%”. Política
resumida en el título de su autobiografía: “keep at it (seguir en la tarea)”, lo
que augura, para muchos, una recesión en los EEUU, que se empieza a sentir en
Europa y de la que aparecen síntomas en China.
Comentan los gurúes, que la Fed resultó más “halcón” (hawkish) de lo
esperado, aplicando una política monetaria más restrictiva, además de ajustar el
crecimiento económico a 0.2% del PBI en el 2022, lo que compromete las
proyecciones del FMI que anticipaban 2.3% para EEUU y 3.2% para el mundo. Ante
tal pronóstico, la Bolsa de Valores de Lima cayó -3.4%, en tanto que las bolsas
del mundo se desplomaron cual dominó: Dow Jones -4.6%, S&P 500 -5.5%, Nasdaq
-6.5%, Londres -4.1%, Hong Kong -4.6%.
Esta decisión de la Fed, empuja al BCR a seguir elevando su tasa de
referencia (6.75%), porque la inversión extranjera directa (IED) abandona los
mercados emergentes y los dólares, cual golondrinas, pueden partir hacia los
EEUU, y para desincentivar este vuelo, se debe evitar que la tasa Fed se acerque
a la tasa BCR. Medida que indefectiblemente provocará una nueva rabieta del
ministro de Economía Kurt “Frozen” Burneo, porque disminuirá nuestro consumo y
de rebote el crecimiento del PBI en el 2022, que si bien Julio Velarde la acaba
de reducir de 3.3 a 3%, no se necesita ser Nostradamus para predecir otro
recorte.
Entre tanto el dólar que ingresó a una senda alcista mundial, subió en el
Perú de S/ 3.87 a S/ 3.89 al anunciarse la inflación de 8.3% en los EEUU
(13/9/22), hasta cerrar en S/ 3.92 el fin de semana debido a la movida de la
Fed, alza letal porque el tipo de cambio es el principal componente importado de
la inflación. No obstante, los “sabios”, banqueros y gerentes que convoca
mensualmente el BCR en la última Encuesta de Expectativas pronosticaron que el
billete verde no pasaría de S/ 3.90 en el periodo 2022-2023, fallida predicción,
que invita a parafrasear al Mefistófeles de Goethe: “Toda teoría es gris, pero
verde el dólar y el inflacionario árbol de la vida”.
En fin, hay que tomar nota de que el BCR solo podrá controlar el alza del
dólar, si la economía genera una mayor cantidad de divisas, y no se continúa con
la feria del endeudamiento, que se alcanza, primero por la vía de aumentar las
exportaciones y la IED, que requiere fomentar la confianza empresarial y apoyar
a los exportadores, y lo segundo, con férrea disciplina fiscal, generalmente
escasa en un gobierno populista como el que sufrimos.