La repudiada de Trump en la Fed se alinea en política monetaria con su archienemigo: apuesta por estímulos del banco central
- Lisa Cook está más preocupada por el empleo que por repuntes de inflación
- La opinión de Cook se inclina por más estímulos, lo cual encaja con lo que quiere Trump

Lisa Cook y Donald Trump tienen una guerra abierta, después de que el presidente estadounidense tratase de despedirla en sus responsabilidades en la Reserva Federal el pasado mes de agosto, una decisión que fue paralizada por el Tribunal Supremo del país en octubre, al menos hasta el mes de enero. El choque entre Cook y Trump, sin embargo, no ha impedido que la miembro de la Junta de Gobernadores de la Fed ahora se incline por defender un enfoque de política monetaria que encaja con la opinión del presidente republicano y sus acólitos ya que, aunque Cook no quiere pronunciarse sobre su apoyo o rechazo a bajar tipos en diciembre, ha admitido en sus primeras declaraciones tras el culebrón con Trump, que está más preocupada por el empleo que por la inflación en Estados Unidos.
Cook ha explicado, en un discurso en la Brookings Institution, que está más preocupada por el peligro de que haya problemas en el mercado laboral del país, que por la posibilidad de que se produzca un repunte de la inflación en los próximos meses. «La política no está en un camino predeterminado. Ahora estamos en un momento en el que los riesgos, en ambos sentidos de nuestro mandato, son elevados», ha señalado Cook, quien, además, se desmarca de dar su opinión ahora sobre si cree necesaria una bajada de tipos en la reunión de diciembre.
Eso sí, la propia Cook admite ahora que el recorte de tipos de la semana pasada «fue apropiado», porque, a su juicio, «los riesgos para el mercado laboral son ahora más fuertes que los riesgos al alza para la inflación», un discurso que encaja con el que está defendiendo Stephen Miran, el hombre de confianza de Trump en la Fed, quien fue nombrado en verano para sustituir a Adriana Kugler.
A pesar de que Cook parece estar ahora más alineada con la visión de Trump en el frente de la política monetaria y los tipos de interés, en la comparecencia de este lunes ha quedado claro que sus opiniones en otros frentes son muy distintos. De hecho, parte de los motivos que llevan a la economista a estar más próxima a un recorte de tipos, que a lo contrario, está relacionado con el daño que, en su opinión, están generando las políticas de Trump.
Para empezar, admite que hay riesgo inflacionista por los aranceles, pero considera que «el efecto de los aranceles en los precios en teoría, debería ser un fenómeno puntual, de una ocasión», que no tendría réplicas en el futuro. Sin embargo, su preocupación por la salud del empleo en Estados Unidos es más fuerte, y parece que también está relacionada con las políticas del presidente republicano, ya que, a su juicio, el descenso que se está produciendo en la creación de empleo «se puede explicar de forma modesta por un descenso en el crecimiento poblacional, derivado de la política de inmigración», ha señalado Cook.




