Las apps de mapas virtuales se han convertido en una herramienta esencial en nuestras vidas para llegar de un lado a otro o para encontrar una localización concreta. Sin duda, Google Maps es el gran referente en este sentido, aunque poco a poco, su plataforma hermana, Waze, va ganando más adeptos.
La principal diferencia entre ambas apps que son propiedad de Google, es que Maps está pensada para moverte de un lado a otro de cualquier manera, mientras que Waze está ideada únicamente para la conducción en coche y por lo tanto su interfaz y sus funciones están enfocadas en mejorar este aspecto.
Por esa razón si usas Waze, es bastante probable que te hayas cuestionado por qué en ocasiones la app no te indica a seguir la ruta que tú sabes que es la más rápida para llegar a tu destino, algo extraño, porque el objetivo es que llegues cuanto antes al lugar.
La razón de ello es porque la app controla muchos más flujos de información que tú, y aunque por un camino puede que haya muchos más semáforos, o la velocidad de circulación permitida es mayor por cierto camino, hay otros elementos y detalles que determinan cómo llegar más rápido al destino.
Esto es porque Waze está conectada con enormes cantidades de información sobre tráfico, accidentes, desvíos y otros datos en tiempo real que cuando calcula la ruta, hay ocasiones en que un camino en el que se hagan más kilómetros al final acaba siendo más rápido.
Por ejemplo, si estás en un atasco, Waze te desvía por una ruta alternativa que, aunque sea un poco más larga, pero vas a llegar antes a tu destino. Como decíamos la app te ofrece siempre la ruta más rápida en ese mismo instante, aunque no sea la más corta, e incluso a mitad de conducción, si detecta una ruta más rápida te puede proponer cambiarla en tiempo real.
Y ya no es solo eso, sino que Waze también analiza los hábitos de conducción de cada usuario, para crear una especie de perfil en el que identifica aspectos como la velocidad media, cómo conduce o cómo toma este las curvas, para luego personalizar las rutas que sugiere a estos.
Por ejemplo, si detecta que te gusta ir rápido es más probable que sugiera rutas con autopistas o autovías donde se puede ir a más velocidad porque sabe que el conductor puede sacarle partido a su estilo de conducción y llegar antes.
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