Los envíos peruanos al exterior de prendas de vestir sumaron US$ 811.2 millones entre enero y agosto de este año, reflejando un incremento de 5.7% en comparación al mismo periodo del 2024 (US$ 767.4 millones), en particular por la demanda de EE.UU., informó la Asociación de Exportadores (ADEX).
El presidente del Comité de Confecciones del gremio, Juan José Córdova Benavides, explicó que el panorama actual es estable, aunque con importantes desafíos por la coyuntura internacional y la presión en los precios. Las tarifas impuestas por el gigante norteamericano no afectaron de manera significativa a este sector, pues fueron menores a las aplicadas a otros países como Vietnam, Bangladesh, India o Sri Lanka. No obstante, precisó que el aumento se trasladó al precio final, lo cual podría reducir el consumo en los segmentos medio y medio bajo, los más sensibles al alza de precios. Por ello, consideró que no hay muchas expectativas de crecimiento, tomando en cuenta que EE.UU. concentra el 67% de los despachos de las confecciones.
“Para el cierre de año se espera un desempeño flat, es decir, sin variación significativa, y es probable que el 2026 se mantenga en ese nivel. Esto podría convertirse en una oportunidad, ya que las marcas internacionales apuntarían a deslocalizar parte de su producción hacia la región, considerando a Perú como una alternativa atractiva por su calidad y cumplimiento en los plazos de entrega”, señaló.
En ese contexto, advirtió que el principal reto será aumentar la capacidad instalada de la industria nacional que trabaja muy cerca de su límite (operan al 90%), impidiendo aprovechar adecuadamente las oportunidades.
“De ahí la necesidad de promover la llegada de más capitales que permitan ampliar la infraestructura productiva y fortalezcan esta actividad. Si las marcas deciden trasladar su producción, debemos estar preparados. Hoy nuestra posibilidad de crecer es poca. Se requieren inversiones en maquinaria, capacitación de personal y fortalecimiento de la cadena de suministro”, puntualizó. Perú es reconocido por la calidad de sus prendas –continuó–, pero necesita mayor escala si desea responder a una demanda global más exigente. Si bien su perfil high-end o de gama alta ayuda a mitigar los efectos de la inflación y los aranceles, la incertidumbre comercial internacional es inevitable y genera retrasos en los pedidos de algunas marcas. “Esto generaría una ligera contracción de entre -5% y -10% en el segundo semestre”, concluyó.
En detalle
Según cifras del Sistema de Inteligencia Comercial ADEX Data Trade, EE.UU. se posicionó como el primer destino de las prendas de vestir peruanas al concentrar el 66.7% del total en los primeros 8 meses del 2025, sumando US$ 541 millones y experimentando un alza de 5.9%.
El segundo lugar lo ocupó Brasil con US$ 50 millones, reportando una variación positiva de 15.5% y un 6.2% de representación. Le siguieron Canadá (US$ 30 millones), Chile (US$ 27 millones) y Alemania (US$ 25 millones). El top ten lo completaron Colombia, China, México, Venezuela y Argentina, llegando a un total de 82 mercados.
Los productos más demandados fueron los t-shirts de algodón de un solo color para hombre o mujer, los demás t-shirts de algodón, camisetas de punto de fibras sintéticas, camisas de punto de algodón, t-shirts y camisetas de punto, entre otras. Según el Reporte Mensual de Agosto