El congresista de Somos Perú José Jeri, expresidente de la Comisión de Presupuesto 23/24 lanzó un comunicado negando la denuncia acaecida en un día de campo en una Casa de Recreo alquilada en Canta por un presunto ataque contra la libertad sexual ocurrido el domingo 29 de diciembre de 2024, durante una jornada que se inició a las 8.30 am con un desayuno con chicharrones y continuó con dos botellas de pisco para asentar y luego otras dos, provocando las inconsciencia de la invitada.
El legislador del «Corazón» aseguró no haber tenido ninguna participación en los hechos denunciados, porque se encontraba, luego de bañarse en la piscina, abocado a «preparar la parrilla», expresando su sorpresa y pesar por la mención de su nombre en la acusación, señalando que al tomar conocimiento de la denuncia, al día siguiente de la charanga, se comunicó con la denunciante, la sobrina política de su amigo Marco Antonio Cardoza que la había llevado con su chofer a la reunión, para ofrecerle su solidaridad y total disposición a colaborar con las autoridades en el esclarecimiento del caso: rechazando «cualquier acto que vulnere los derechos de las personas».
El parlamentario señaló que nunca ha estado involucrado en situaciones de esta naturaleza y para garantizar la transparencia del proceso, solicitó licencia a su partido político y se mostró confiado en que las investigaciones permitirán demostrar su inocencia.
Sin embargo, el certificado del médico legista acredita una relación reciente contranatura de la denunciante (Epicentro), quién asegura que Jerí la pretendía sentimentalmente desde hace meses.
No se descarta que alguno de los hermanos Salas, cercanos a Somos Perú, Sergio, el exministro de Trabajo, vocero legal de Martín Vizcarra o Martin, el exfiscal anticorrupción, asuma su defensa.