En su primera muestra individual el artista peruano Pablo Quevedo se inspira en la cultura precolombina Paracas para presentarnos “Transiciones”. Ocho de las trece pinturas de esta exposición muestran iconografías extraídas de mantos Paracas y las restantes son retratos de fardos pintados del natural.

La exposición forma parte del conjunto de muestras de la primera temporada de Monumental Callao 2025, va del 18 de enero al 20 de febrero en Casa Fugaz (Constitución 250). El horario de visita es de martes a domingo de 11 am a 6 pm. El ingreso es libre.

De estas trece pinturas, cuatro representan a fardos que llevan como títulos El cuidador (compasión), In the long run (esperanza), Paz a tus huesos (perdón), El miedo lo complica todo (amor). “Estas últimas son prueba contundente de la solvencia del autor en su oficio. Recrea fielmente el objeto de estudio bajo un juego de luces y sombras que le permite profundizar en la riqueza del pigmento y sus posibilidades matéricas celebrando la supremacía del óleo entre las técnicas de la imagen”, apunta el artista Iván Fernández-Dávila, curador de la muestra.

“Quevedo acierta en otorgar una apariencia inconclusa a todas sus pinturas al no cubrir la superficie completamente hasta los bordes del lienzo. En los pequeños formatos pinta la ilusión de hilachas, de telas cercenadas, recordándonos la condición de pintura en sí y especialmente la idea verdadera de que todo lo existente en realidad existe en proceso”, agrega en el texto curatorial.

El estilo de las pinturas de Quevedo es decididamente figurativo e inclinado a lo clásico. Sobre la concepción de sus obras, el artista declara: ““Nacen del impulso de querer plasmar recuerdos de experiencias vividas, de una idea que ronda mi mente y que necesita materializarse para poder asimilarla propiamente. Buscan generar narrativas que den solución a algún conflicto interno”. 

Acerca del título de la muestra, el artista explica: “Transiciones es un cambio de un estado de ser a otro.  Es el momento de la incertidumbre, en el que coexisten todas las posibilidades.  Me gusta como los Paracas pensaban en sus muertos como semillas, en sus fardos como plantas y sus cementerios como huertos. Para mí, estas pinturas son un rito de tránsito, una transformación a otra cosa mayor, un cambio de paradigma. Para poder renacer, primero hay que asumir su propia muerte, cosa que nos corresponde a cada uno en su debido momento”.

Pablo Quevedo Orrillo (Washington D. C., Estados Unidos, 1989). Artista visual, estudió Lingüística y Literatura en la Pontificia Universidad Católica del Perú (2007-2011) y Artes Visuales Contemporáneas en Corriente Alterna (2011-2014). Continuó su formación artística en el Programa de Dibujo y Pintura en la Florence Academy of Art de Italia (2015-2018). Ha participado en exposiciones colectivas en Perú y Estados Unidos. Su trabajo se centra en el estudio de la espiritualidad, la simbología animal y la naturaleza humana.