Reflexiones post elección - Por Juan Carlos Valdivia - EL MONTONERO
Reflexiones post elección
El reciente
proceso electoral ha estado lleno de hechos sorpresivos, con candidaturas que
brillaban y luego desaparecían, con denuncias increíbles, pero no mucho debate
ideológico. Los resultados, con dos candidaturas de derecha disputando la
presidencia, nos traen también la necesidad de revisar algunos conceptos. Veamos
algunos:
La
transición democrática. Es el periodo luego del gobierno de
Alberto Fujimori. Es marcado no solo por la reconstrucción de la
institucionalidad democrática sino por lucha contra la corrupción. Esta
transición falleció el día que se conocieron la existencia de Ecoteva, las
cuentas offshore de Alejandro Toledo y sus millonarias inversiones
inmobiliarias. Esa superioridad ética de la cual se revestía la democracia
encontró un vacio, un hoyo profundo. Y luego aparecen las agendas de la señora
Heredia y su detallado informe económico de millonarios depósitos, las
revelaciones de la operación Lava Jato con la gente de OAS trayendo plata en
efectivo para lograr obras con la gestión de la izquierdista señora Villarán. La
transición desfalleció por lo que parece una septicemia
incontrolable.
El cambio
generacional. Con Ollanta Humala parecía se producía el cambio
generacional. Y las recientes elecciones generales parecía que producían
la cancelación definitiva de la generación de Alejandro Toledo, Alberto
Fujimori, Alan Garcia. Este año parecía que las candidaturas de Keiko Fujimori y
Julio Guzmán serian las protagónicas. Y en la izquierda Verónika Mendoza mandaba
en busca de su AFP a la generación que surgió de enfrentarse a la dictadura
militar de los setenta. Pero Pedro Pablo Kuczynski apareció para
contradecirnos
El
Ejecutivo. Pedro Pablo Kuczynski preside el gobierno con menor
presencia en el Legislativo desde Bustamante y Rivero. No cuenta tampoco con un
partido político con presencia nacional o con capacidad de organizar a las masas
que lo respalden. Ni sus más distinguidos congresistas son miembros de su
partido. Mercedes Araoz preguntada al respecto dijo que estaba pensando si se
inscribía en el partido. No dijo que lo fuera a hacer. Durante este siglo, tanto
Alejandro Toledo como Ollanta Humala lograron acuerdos de gobierno que les
permitieron tomar decisiones. El primero con el FIM, y el segundo con Perú
Posible. Alan García lo hizo de manera tácita con el fujimorismo. PPK anuncia
que buscara un gabinete de ancha base, que integre a personajes cercanos a
varios partidos, aunque no parece mostrar voluntad de compartir el poder. No
tendrá acuerdos políticos con otros partidos, pero si buscara mostrar
amplitud.
El
Legislativo. La presencia mayoritaria del fujimorismo
marcara su gestión. Ya anuncio Keiko Fujimori que tendrán una agenda legislativa
basada en su plan de gobierno. Eso quiere decir que pretenderán que PPK gobierne
con el plan de gobierno del fujimorismo. Esto planteara un nuevo escenario. Si
bien el fujimorismo pretenderá erigirse como oposición al oficialista PPK, puede
terminar convirtiéndose en el objeto de cuestionamiento desde la izquierda
parlamentaria y desde la derecha tecnocrática en el Ejecutivo. Y entonces PPK
seria la oposición al fujimorismo parlamentario. Y para ello contaría con el
beneplácito del poder mediático y del poder empresarial. Y ya hemos visto como
Verónika Mendoza cuestiona todo paso que da el fujimorismo, proponiéndose así
como una alternativa al mismo. El ejercicio del poder desde el Congreso puede
jugar en contra de Fuerza Popular.
Un
nuevo gobierno ante nuevos escenarios. Hay que estar atentos como se
mueven las fichas. Podemos estar ante un gran gobierno de unidad nacional o ante
la reedición de una lucha entre el Ejecutivo y el Legislativo. Veremos cómo se
mueven las fichas de cada quien.