Daniel F: Ahora sí se puede vivir de la música. Es un sector rentable
Entrevista realizada por André Agurto para el diario
Gestión
Daniel F dice ser un tipo común y corriente, pero su nombre ya
es un hito del rock hecho en el Perú. El líder de Leusemia, banda que irrumpió
en la escena alternativa en los 80, tiene una treintena de producciones entre
discos, casetes y maquetas. “Los fans, con esa exactitud propia de ellos, me
recuerdan: ‘Hasta ahora, tienes 793 canciones hechas”, dice irónicamente.
El F, como lo llaman todos, llegó a la redacción de Gestión,
desde donde puede avizorarse el cerro San Cristóbal. “Durante la guerra con
Chile, pusieron cañones en la punta”, afirma. “Luego, con los años, encontraron
uno en las laderas y la gente se lo llevaba por partes”, expresa.
Daniel F es un conocedor de la guerra con Chile y, actualmente,
prepara un libro al respecto.
¿La historia que contará será realidad o
ficción? Es una novela ambientada en una época en que las guerras
eran el pan de cada día. La guerra con Chile terminó siendo otra guerra civil y
totalmente sangrienta. El villano no es ningún país en especial, sino la guerra
misma, el egoísmo de ciertas personas y la maldad.
¿Qué diferencia hay entre escribir libros o
canciones? La canción tiene un formato condensado, un corset mucho
más estricto. En cambio, cuando uno hace literatura uno vuela, es una
prolongación donde puedo decir mucho más.
¿Se siente más libre en los libros que en las
canciones? Lógicamente. Escribo todo el tiempo. Incluso, cuando voy
por la calle, estoy imaginando frases. Las anoto y luego veo en qué parte del
libro las puedo poner.
Entre ambas, ¿cuál es más rentable? Con los
libros me ha ido bien. Tengo la ideología del “hazlo tú mismo”, de la
autogestión. Edito, corto el papel, diseño la portada. Eso no puedo conseguirlo
con una editorial.
¿Cuántos ejemplares vende un libro suyo? En
la primera edición siempre salen 2,000 ejemplares. Luego se vuelven a imprimir
1,000 más. Así hasta que se puedan cubrir todas las solicitudes.
¿Las editoriales no lo llaman? Sí, pero
todavía no sé qué haré para este último libro. Ya me han llamado y me han dicho:
“El siguiente libro tiene que ser con nosotros”. Han visto que la difusión y la
respuesta de la gente es muy fuerte.
La farándula y el rock Daniel F no
es nuevo en el oficio de escribir. En la década del 90, publicaba un fanzine
llamado Tarántula, que se multiplicaba y distribuía gracias a fotocopias. En él
hablaba sobre música.
“Lo que en ese tiempo era el fanzine, ahora es el blog en
Internet”, afirma. Hace dos años abrió uno y allí continúa, de alguna manera, lo
que empezó hace 20 años. Lamenta que los periodistas de rock sean casi
inexistentes.
Hay menos prensa dedicada al rock. ¿Qué cree que
pasó? La prensa alternativa se ha reducido y la poca que queda se ha
“farandulizado”. Todo semaneja bajo esos códigos. A veces viene alguien de la
prensa del rock y me pregunta “¿Qué te parece la pelea entre Toño Jáuregui y
Salim Vera de la banda Líbido?” (risas).
¿Antes habían más fanzines, revistas de
rock? Ahora son otros tiempos. Si quiero hablar de música, lo
escribo, lo subo al blog e instantáneamente hay mucha gente pronunciándose.
Sí hay futuro (en la música) Daniel
F tiene 55 años y la mayoría de ellos ofrendados al rock. En sus inicios, a
finales de los 70, dedicarse a la música era visto como una empresa suicida.
Hoy, el artista sostiene que esta situación ha cambiado.
¿Se puede vivir de la música en el
Perú? Claro. La mejor prueba es que las academias, los estudios y
las salas de ensayo que se han multiplicado. Además, a nivel universitario, no
solo enseñan música, sino también los mecanismos para que esta se mueva:
producción, management, derechos de autor. Si antes los músicos eran la última
rueda del coche, ya no lo es más.
¿Considera cierta la frase “los músicos no tienen apoyo
de nadie”? Sí, pero es un lloriqueo ridículo. Los músicos tienen la
fuerza suficiente para sacar sus cosas adelante. ¿Por qué tendrían que
apoyarnos? La música no es una pollada. Si mis canciones van a sonar en la radio
a la fuerza, por un decreto ley y no porque a la gente le gusten, me sentiría
mal.
¿Existe cierto misticismo alrededor de Daniel F, de su
nombre como marca? No lo veo por ningún lado, es decir, no me la
creo, pero sí siento que hay mucho cariño de la gente. Eso me sucede en muchas
ciudades y en las redes sociales también.
¿Qué prefiere: ser recordado como el líder de Leusemia
o como Daniel F, el solista? Creo que es lo mismo. Soy músico y
escribo canciones. Es mi trabajo.
¿Y qué es más rentable? No, no tiene que
ser rentable o no. Es lo mismo. Por ejemplo, a un evento con Leusemia que
hicimos hace tiempo en Los Olivos no fue nadie. En el mismo local, una semana
después fui yo solo y estaba totalmente repleto. Entonces, ya no sé cuál es la
respuesta a eso.
El solista que puso más Sus discos
como solista tienen influencia del rock progresivo de Pink Floyd y Yes. Pero
también tienen mucho de la trova y baladas de Silvio Rodríguez y Fernando
Ubiergo, canciones que hace suspirar hasta al más rudo de los rockeros.
¿Qué proyectos prepara? Ya no me urge hacer
discos. Antes había una consigna de que teníamos que hacer discos cada dos o
tres años. De pronto ya no.
¿Por qué no? Uno hace una canción, la toca
en los conciertos y los fans la suben a la red. Muchísimo material que hay en
internet es inédito. De allí, fácilmenfácilmente, podría salir un disco
cuádruple. Pero me imagino que los fans piden discos. Sí, vengo de la década del
setenta. Así que soy alguien que quiera o no, me guste o no, tengo que hacer un
disco.
¿Qué puertas le ha abierto la música? La
música a mí me ha dado todo lo que tengo. A veces estiro la mano para tomar el
taxi y el conductor es un fan y me dice “sube”.
¿Y los libros? La posibilidad de viajar.
Gracias a eso he viajado más, ya no solo por los conciertos, sino también por
las ferias del libro.
Hoja de Vida
Nombre: Daniel Augusto Valdivia Fernández. Profesión:
Cantautor y escritor. Discos como solista: Memorias desde Vesania, Origen de
los fundamentos, Zafiro de las galas, La ventana de los cíclopes. Sitio Web:
El escondrijo de los
tuertos