Un gobierno selfie - Por Javier Barreda - EXITOSA DIARIO
"Un gobierno selfie", la
palabra de Javier Barreda
Indiscutiblemente, por ser tan inoportuno, será uno de los
selfies más comentados después del mensaje de 28 de julio el que se
tomó medio gabinete en pleno discurso del Presidente ante militantes del
nacionalismo en Palacio de Gobierno. Un selfie ministerial se sumó al opaco
mensaje del presidente Humala, un mensaje sin lineamientos a futuro, con
cifras discutibles, con ausencia de autocrítica y sin comunicar acciones
ante el decrecimiento alarmante de la inversión, los conflictos sociales o
la reducción de la generación de empleo. Lo que simboliza es pésimo: un
presidente al que sus ministros no respetan, no escuchan, no atienden.
El liderazgo tiene un peso clave en gobernabilidad refería el politólogo
Manuel Alcántara hace poco en un seminario organizado por el Instituto
de Estudios Políticos Andinos (IEPA). Y ese liderazgo tiene en lo simbólico
un gran peso. Los gestos son muy relevantes en política. Solo por una
impertinencia, al debate sobre los cuatro años de Humala y sus
oportunidades perdidas se suma un punto más de decepción: el selfie de
medio gabinete y un presidente que no concentra la atención de sus propios
ministros. Que los ministros no entiendan la poca pertinencia de usar
el Smartphone o la tablet para ‘selfiarse’ en medio del esfuerzo de Humala por
sentar liderazgo ante sus propios seguidores, expresan su poca valoración
de ministros por la política, el liderazgo y sus símbolos. ¿No advertían el
efecto corrosivo en la figura del Presidente?, ¿se culpará a los
medios de este ridículo ante el que cualquier otro presidente hubiese ya
castigado quitando confianzas?
Esta escena penosa del selfie a espaldas del Presidente parece banal
para algunos ministros. Preocupa ello. Porque a lo mejor el modo selfie es
la forma normal de gobernar de ministros y del propio Presidente: mirarse y
sonreírse a sí mismos, dándole la espalda al país y creyéndose ellos mismos
su propio relato, sus cifras, sus ‘reformas’; ignorando adolescentemente
las preocupantes situaciones y proyecciones que tiene el país. Un
mirarse solo a sí mismos en un selfie que por mucho tiempo simbolizará el
discurso y el quehacer del quinquenio de Ollanta
Humala.