Unacem: la demanda de cemento dependerá la ejecución de grandes obras de infraestructura
Unacem es la mayor cementera del país, con plantas en Atocongo
(Lima) y Condorcocha (Tarma). Hoy se publicó una entrevista en Día 1 (suplemento
de El Comercio) a su gerente general, Carlos Ugas, que la misma empresa envió a
la Superintendencia del Mercado de Valores y copiamos a continuación:
UNACEM declaró el mes pasado que no iba a reducir su
producción este año - pese a la desaceleración de la minería - por el mayor
impulso de la construcción de infraestructura; sin embargo las cifras de los
primeros meses del año no han sido buenas. ¿Cómo le ha ido a Unacem en el primer
trimestre? ¿Cómo se explica ese resultado? ¿La cifra está dentro de las
previsiones de la empresa? El despacho de cemento de Unacem al
primer trimestre en el Perú se mantuvo en mismos índices que el año pasado.
Esperábamos un crecimiento del orden del 5%, si se empezaban los grandes
proyectos como el Metro de Lima o la expansión de la segunda pista del
aeropuerto, entre otros.
Creemos que el hecho de tener nuevos gobiernos regionales, que
recién se están organizando puede haber retrasado las inversiones.
Adicionalmente, el efecto de las fuertes lluvias también afectó los primeros
meses del año.
Visto este panorama, la mayoría del exceso de producción -sobre
todo de la planta de Atocongo-, lo exportaremos. En ese sentido, prevemos
exportar hasta 500,000 toneladas de clinker este año.
¿A qué países estarán destinadas sus
exportaciones? Actualmente estamos exportando clinker a Chile y
Venezuela, y estamos revisando otros mercados como Brasil.
Si bien la lectura para el 2015 es complicada - pese a
los paquetes 'reactivadores' del gobierno, el ruido político y el inicio de la
campaña rumbo al 2016 no ayudan. ¿Qué expectativa tiene la empresa para este
año? ¿Espera una aceleración de la demanda en los próximos meses? ¿Por
qué? Mucho dependerá de la ejecución de las grandes obras de
infraestructura como el Metro de Lima, el túnel de la avenida Nestor Gambetta
cerca al aeropuerto, etc.
Esperamos que en la segunda mitad del año algunas de estas
obras empiecen y se dé un crecimiento de la demanda de cemento. En el caso de la
auto-construcción, creemos que esta se mantendrá en su ritmo normal, que es el
75% de nuestro mercado.
UNACEM también mencionó las inversiones para este año.
¿Qué proyectos tiene Unacem previstos para el 2015? ¿De qué montos de inversión
hablamos? Los grandes proyectos de ampliación de la planta de
Condorcocha y de la planta de Atocongo, por un total de 2 millones de toneladas
al año de cemento, terminaron en los años 2012 y 2013, respectivamente. Esto ha
traído consigo un exceso de capacidad que, como mencionamos anteriormente, se
está exportando a los mercados de la región.
Ahora bien, este año se piensa concluir el proyecto de una
nueva molienda de cemento puzolánico en Condorcocha, que aumentará la capacidad
de producción de cemento en 700 mil toneladas por año; así como también se
pondrá en marcha la tercera etapa de la hidroeléctrica Carpapata III con 13 MW
adicionales. La inversión restante en estos proyectos es de unos US$ 50
millones.
Adicionalmente, a nivel de nuestra subsidiaria Celepsa, estamos
construyendo una central hidroeléctrica en el río Marañón bajo el esquema RER
(Energías Renovables) de 20 MW que será conectada al sistema nacional de energía
y que demandará una inversión de unos US$ 60 millones en dos años.
¿En esos planes está incluida la ampliación de la
planta de Condorcocha? ¿Hay algún avance de ese proyecto? No. La
ampliación de una nueva línea 5 en la planta de Condorcocha, de 1.1 millones de
toneladas por año, está prevista para dentro de unos 3 años, dependiendo del
crecimiento de la demanda de cemento en el país.
¿Qué inversión requería tener una línea más en esa
planta? La inversión para la nueva línea de producción en
Condorcocha se estima en alrededor de US$ 250 millones.
¿A qué avance está la central ubicada en el Marañon?
¿Cuándo debe comenzar a operar? ¿Qué empresa construye la
central? Se están iniciando recién las obras de accesos y movimiento
de tierras, por lo que debe operar en aproximadamente 2 años. El contratista es
Motta – Engil.
Hace unos años, cuando hablábamos de lo que supondría
para Unacem la presencia de Cemex en nuestro país, mencionó que la empresa tenía
un plan para competir con el operador que decidiera ingresar a su zona de
influencia. Sin embargo pasaron los años y las cosas cambiaron mucho para la
firma mexicana. ¿La paralización del proyecto de tener una planta de Cemex en el
Perú impacta en algo en la estrategia de Unacem? ¿Por qué? En lo
absoluto. En UNACEM siempre hemos actuado con visión de largo plazo, pensando en
cómo anticipar una mayor demanda, independientemente de lo que haga o no la
competencia. Precisamente por ello hemos realizado diferentes ampliaciones que
hemos acometido a lo largo de los más de 60 años que venimos operando en Perú.
En UNACEM estamos listos para competir con los operadores que actualmente se
encuentran en nuestra zona de influencia, sean estos nacionales o
extranjeros.
Se dice que el proyecto de Cempor sería destrabado y
podría concretarse. ¿Unacem tomaría alguna previsión comercial de concretarse la
construcción de esa planta cementera? Como lo hemos mencionado
anteriormente, nosotros hemos hecho las ampliaciones y mejoras tecnológicas en
nuestras plantas, pensando en atender a nuestros clientes, en satisfacer una
demanda local y hasta internacional. Esa visión de crecimiento e inversión
constante es la que hoy nos otorga una capacidad instalada holgada y la
eficiencia para atender correctamente al mercado .
Tengo la impresión de que el ingreso de Cemex al
mercado local cambió (o quizás activó) la pauta comercial de la empresa.
Menciono esto porque si bien la empresa mexicana ha puesto por el momento en la
congeladora su proyecto en el país, Unacem mantiene una fuerte presencia en
medios masivos. ¿Cómo se explica eso? Es parte de una política de
comercialización más moderna y global que empezó ya hace varios años atrás,
incluso antes de la llegada de competidores de fuera, específicamente en el año
2006, y que básicamente lo que busca es fidelizar a los clientes con nuestros
productos y sus más de 60 años de historia. Parte de esta política comercial es
nuestra red de distribución Progresol, que es una de las más grandes del
país.
Menciona su política comercial y lo que se viene a la
mente es la confirmación de la multa impuesta por Indecopi por supuestamente
haber querido obstaculizar la operación de Cemex. En qué está el proceso? ¿Ya
acudieron al poder judicial? Sí, efectivamente ya se presentó la
demanda contenciosa administrativa ante el Poder Judicial.
En algún momento el ex - gerente general de Cemento
Andino -antes de la fusión- declaró que la expansión natural de la empresa
estaba en el oriente del país. ¿En un escenario de desaceleración de la demanda
en la costa central, retomarían esos planes? ¿Por qué? Yo te diría,
¿por qué no? Nosotros evaluamos constantemente la apertura de nuevos mercados
para nuestro portafolio de productos, con lo cual es una alternativa que de
darse la oportunidad evaluaremos.
¿De ralentizarse más la demanda, analizarían expandir
la presencia de su producto bandera, cemento Sol? Es algo que está
en evaluación. De momento se prevé la expansión en cementos adicionados como se
mencionó anteriormente.
Menciona cementos adicionados, ¿a qué productos se
refiere? Los cementos adicionados son cementos con adición de
puzolana, escoria, cenizas volantes o caliza.
¿Hacia dónde apuntaría esa expansión de cemento
Sol? Cemento Sol, Cemento Andino y el resto de nuestro portafolio
apunta al mercado de construcción en general.
Unacem realizó una emisión en dólares para financiar la
compra de la planta de Lafarge en Ecuador, ¿cuánto impacta el alza del tipo de
cambio a la empresa? La economía ecuatoriana está dolarizada y por
lo tanto los ingresos y dividendos de nuestra planta en Ecuador son en dólares,
neutralizando así el efecto tipo de cambio. La idea es que los dividendos cubran
los gastos de la emisión que se realizó.
Si bien está lejos de ser una 'Venezuela', Ecuador sí
tiene temas políticos complicados ¿Por qué incursionar en este momento en ese
mercado? Las oportunidades de inversión en cemento no se dan
frecuentemente y son pensadas para el largo plazo. Ecuador tiene una cultura
similar a la peruana y viene invirtiendo mucho en infraestructura.
Pensamos que tiene un gran potencial en vivienda, en generación de energía
eléctrica y minería, así como en infraestructura vial.
¿Qué similitudes y diferencias hay entre el mercado
cementero peruano y ecuatoriano? Tiene un mercado parecido al
peruano con 75% de ventas de cemento en bolsas y 25% de cemento a granel.
Creemos que podemos hacer importantes sinergias.
¿Con la compra de la planta en Ecuador, la empresa se
asegura el 23% del mercado cementero en ese país, ¿Tiene espacio Unacem para
ampliar esa cifra? ¿Tiene planes con miras a lograrlo? ¿Por
qué? Nuestra planta en Otavalo, Ecuador, opera al 100 % de
capacidad. Cualquier inversión en capacidad adicional dependerá del crecimiento
del mercado ecuatoriano.
¿Qué aporta para el grupo su
nueva operación en Ecuador? Pensamos tener sinergias por la cercanía
y por el intercambio de experiencias de todo tipo, así como desarrollo de
productos relacionados al cemento.
¿Qué tipo de sinergias habrían con Ecuador? ¿Es
factible atender el sur ecuatoriano o el norte peruano? En principio
se buscan sinergias de intercambio de conocimiento y experiencias de ambas
empresas. Puede haber intercambio de ingeniería para futuros proyectos. También
el desarrollo de varios productos relacionados al cemento.
¿Podrían replicar en Ecuador su estrategia de
integración vertical aplicada en el país? Se está estudiando el
mercado de Ecuador y sí creemos que es posible ver el tema de integración
vertical.
¿Qué proyección de crecimiento hay este año para el
mercado ecuatoriano? Todavía se esta analizando el impacto de la
baja internacional del precio del petróleo en la economía ecuatoriana y su
reflejo en la industria de la construcción.
¿Cómo avanza su operación en Arizona? La
planta de cemento en Drake, Arizona, está operando cada vez mejor. El mercado
empieza a levantar luego de varios años de paralización por la ruptura de la
burbuja inmobiliaria y la crisis. Tenemos buenas expectativas al respecto.
¿A qué nivel de uso de su capacidad instalada está la
planta? El año pasado estuvo al 50% de capacidad. Al cierre de este
año se espera llegar a más del 70% de capacidad.
¿Es factible una expansión de su subsidiaria en EE.UU.?
¿Por qué? Como mencionamos en la respuesta anterior, esperamos que
la planta en Arizona opere al 70 % de capacidad instalada al cierre de este año,
por lo que tiene capacidad para atender el crecimiento del mercado de los
próximos años. Al igual que en Ecuador, cualquier inversión en capacidad
adicional dependerá del crecimiento del mercado en el futuro.