Crecimiento económico de China se desacelera a un 7,3%, cerca de mínimo de 6 años
El crecimiento económico de China bajó a un 7,3 por ciento entre
julio y septiembre respecto al año precio, su menor expansión desde la crisis
financiera global, lo que refuerza las expectativas de que Pekín necesitará
aplicar más medidas de estímulo para evitar una desaceleración más fuerte.
La cifra fue la más baja para la segunda economía mundial desde
comienzos del 2009, cuando la tasa de crecimiento cayó a un 6,6 por ciento,
mientras un débil mercado inmobiliario se convierte en un peso cada vez mayor
sobre el sector manufacturero y la inversión.
Economistas consultados por Reuters esperaban que el crecimiento
disminuyera a un 7,2 por ciento desde un 7,5 por ciento en el segundo trimestre,
aumentando las preocupaciones sobre una débil expansión mundial, lo que ha hecho
caer a los mercados financieros en las últimas semanas.
En una base trimestral, el crecimiento bajó a un 1,9 por ciento
frente a las expectativas de un 1,8 por ciento, desde el 2,0 por ciento del
segundo trimestre.
Otros datos divulgados el martes junto a la cifra del Producto
Interno Bruto (PIB) mostraron que la producción industrial creció un 8,0 por
ciento en septiembre respecto al año previo, superando las expectativas de una
expansión de un 7,5 por ciento y por sobre el mínimo de seis años que registró
en agosto de un 6,9 por ciento.
La inversión en activos de renta fija, un motor clave de la
economía china, fue menor que la esperada. Subió un 16,1 por ciento en los
primeros nueve meses comparado con el mismo período del año previo, por debajo
del aumento del 16,3 por ciento e inferior al 16,4 por ciento de los primeros
ocho meses del año.
Las ventas minoristas crecieron un 11,6 por ciento en septiembre
respecto al año previo, por debajo de las expectativas de analistas de un 11,8
por ciento y menor al 11,9 por ciento del mes anterior.
Una serie de datos económicos mediocres y por momentos alarmantes
presagió en los últimos meses una desaceleración del crecimiento económico de
China, mientras la creciente presión del enfriamiento del mercado inmobiliario
ha restado efecto al impacto de las medidas de estímulo que fueron presentadas
anteriormente en el año.
Se espera que Pekín anuncie nuevas medidas de respaldo en
respuesta al débil panorama económico, mientras China se encamina a incumplir su
meta oficial de crecimiento para el año de un 7,5 por ciento, dijeron analistas
antes de la divulgación de los datos.
Sin embargo, el primer ministro Li Keqiang ha dicho varias veces
que el Gobierno toleraría un crecimiento levemente menor a la meta, siempre y
cuando el mercado laboral resista.
La mayoría de los economistas no espera una medida de política más
agresiva como un recorte de tasas de interés, a menos que las condiciones se
deterioren marcadamente.