Ricardo Vásquez Kunze,Desayuno con diamantes
A diferencia de la ya célebre Encuesta del Poder que
realiza todos los años la empresa Apoyo entre un grupo reducido de personajes
que por una u otra razón tienen relevancia pública, Datum ha realizado la misma
encuesta, pero esta vez con los que tienen el real y definitorio poder del
voto. Es, digámoslo así, una reivindicación fundamental al poderoso que nunca
aparece en la primera encuesta, pero que debería ser el primero de todas: el
Soberano. Veamos qué dice el pueblo.
1.- La esposa
El presidente de la
República ha expresado que este primer lugar de Nadine Heredia en la percepción
popular del poder está muy bien ganado. Es porque la gente ve que trabaja, ha
dicho el jefe del Estado. Más allá del amor galante que todos sabemos que le
profesa a su señora, el presidente debería tratar de ser más suspicaz con sus
respuestas. Porque si Nadine Heredia es la primera porque trabaja, alguien
podría pensar que él, siendo el presidente, está segundo porque no
trabaja.
2.- El presidente
Es el primero, sí, pero
en pasar a la historia como el segundo más poderoso teniendo en los hechos todo
el poder en sus manos. Jefe del Estado y jefe del Gobierno, comandante supremo
de las FF.AA., director de la política exterior y las relaciones
internacionales, a Ollanta Humala las feministas deberían erigirle una estatua.
Aunque sea por default, claro. En cuanto al pueblo, ese es otro
cantar.
3.- El ex presidente
Solo hay uno, al
parecer, a ojos del Soberano. Alan García ha sabido conservarse en la memoria
pública como el tercero más poderoso del Perú estando ya en el llano. Es un
logro importante teniendo en cuenta el caudal de una mayoría de líderes de
opinión pública que va en contra. También ocupa el tercer lugar en la
credibilidad popular, en la que Ollanta Humala está cuarto y Nadine Heredia
sexta. O sea, el pueblo le cree más al ex presidente que al presidente y su
esposa.
4.- La hija del ‘Chino’
Su primer lugar en
intención de voto no se condice con el cuarto en la percepción popular de
poder. Y ahí hay un gran problema. Alguien de su entorno debería hacerle
comprender a Keiko Fujimori que en el Perú termina ganando la Presidencia el
que da visos de ser el más poderoso, aunque en realidad no lo sea. Si no, que
le pregunte a su papá.
5.- El magnate
Es increíble el poder de
una marca hecha nombre. Dionisio Romero es un venerable jubilado y, para un
pueblo tan desmemoriado como el peruano, sigue en mente como el rey Midas. Su
quinto puesto vale oro.
6.- El mudo
Va puntero por Lima con
cuarenta y pico por ciento y solo el 2% de ese mismo pueblo considera a
Castañeda poderoso, con un 6% que apenas le cree. O sea, la reflexión es obvia:
¿qué hacen los otros para explotar esa espectacular debilidad?
7.- El cocinero
2%. ¡Ay, al menú de
Gastón le faltó una lata de espinacas!
8.- El príncipe de la
Iglesia
A Juan Luis Cipriani el pueblo le da 1% de poder en el
Perú. Álvarez Rodrich & Cía. le dan 100%. Gracias por el wishful thinking,
agradecerá el cardenal.