¿Qué Motiva La Avidez Por Presidencia Del Congreso?
Por César Gutiérrez
La penúltima legislatura del Congreso de la República que está
por iniciarse en vísperas de las próximas fiestas patrias, ha generado crisis en
la bancada del movimiento político del gobierno. El apetito de control de la
cogobernanta Nadine Heredia ha colisionado con el legítimo interés de
congresistas de provincias de su propia agrupación que se sienten ninguneados
por el poder ejecutivo. La tozudez de mantener a la candidata de la primera
dama, puede generar un desbande oficialista que termine dejando el control de la
mesa directiva a la oposición. Todo dependerá de lo que puedan ofrecer los
bandos en disputa para alcanzar los votos de los 22 descontentos. Por el
lado del gobierno la prebenda a ofrecer será el manejo de cargos públicos
relevantes en las regiones; mientras que la oposición puede ceder presidencias
de comisiones en el legislativo.
Lo importante es determinar cuál es la motivación para tener el
control del legislativo. La agenda congresal se centra en dos áreas: leyes
de trascendencia en los sectores económicos y denuncias que pongan en jaque al
contendor.
En los temas económicos, el punto más sensible es una
reforma a la ley de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), que se
refiera al porcentaje del salario del trabajador que irá a las arcas de la AFP
Habitat, que es la que tendrá a cargo la gestión de los fondos de los
trabajadores independientes. Para los más suspicaces y preocupados por el
mantenimiento del “establishment” económico lo relevante es impedir cualquier
desvarío que pueda llevar al gobierno a un afán controlista. Indicios de tener
una vocación estatista los hay: la ley universitaria promulgada y la pasada
aspiración de querer comprar las acciones de Repsol en la Refinería La Pampilla,
son dos buenas muestras.
Sobre las acusaciones, la fuente es inagotable y para el
gobierno es una herramienta poderosa para tener a los discrepantes ocupados, más
aún ahora que se ha convertido en moneda corriente acusar y encarcelar de manera
inmediata. Pero lo más importante es la innegable pretensión de inhabilitar al
ex presidente Alan García; la pérdida de los votos en la bancada gobiernista
hará que el deseo que emerge desde las entrañas del nacionalismo se
frustre.