Expertos afirman que en el mundo hay agua para todos, pero mal distribuida
América Latina, Asia y África tienen agua suficiente para atender las
necesidades de la población, pero el uso ineficaz de ese recurso y su
distribución desigual generan conflictos en estas regiones, señala un estudio
presentado hoy en Brasil durante la primera jornada del XIV Congreso Mundial del
Agua.
"Está claro que hay suficiente agua para satisfacer las necesidades
alimentarias, energéticas, industriales y medioambientales (de estas regiones)
en el siglo XXI", explica el informe elaborado por investigadores del Programa
de Desafío en Agua y Alimentación (CPWF, por su sigla en inglés).
La
investigación del CPWF, un programa del fondo multilateral Grupo Consultivo para
la Investigación Agrícola Internacional (Cgiar, por su sigla en inglés), muestra
que las principales cuencas hídricas de estas regiones tienen agua suficiente
para duplicar la producción sostenible de alimentos en las próximas
décadas.
El estudio, no obstante, reconoce que "abundan los conflictos
relacionados con el agua y su escasez en sociedades de África, Asia y América
Latina que atraviesan cambios muy rápidos".
Los investigadores consideran
que el problema es el uso ineficaz y la "distribución desigual" de las enormes
cantidades de agua que fluyen en las cuencas de los ríos estudiados.
El
estudio cita como ejemplo el caso de las granjas agrícolas y ganaderas de África
que sólo usan el 4 por ciento del agua disponible en el continente.
El
informe exigió cinco años de trabajos a investigadores de 30 países que
analizaron la potencialidad y el uso de las cuencas de los ríos de la cordillera
de los Andes, del Sao Francisco (Brasil), de los africanos Nilo, Níger, Limpopo
y Volta y de los asiáticos Indo-Ganges, Karkheh, Mekong y Amarillo.
Estas
cuencas cubren 13,5 millones de kilómetros cuadrados de regiones en las que
viven 1.500 millones de personas, de las que 470 millones están entre las más
pobres del mundo.
Según la investigación, algunas tierras cultivables en
Asia y Latinoamérica no aprovechan bien todo su
potencial.
"Efectivamente, hay escasez en algunas zonas, pero nuestros
hallazgos demuestran que el problema, en general, es que en las cuencas de estos
ríos el agua no se está utilizando eficientemente ni distribuyendo de manera
igualitaria. En definitiva se trata de un desafío político, y no de una cuestión
de recursos", señaló Alain Vidal, director del CPWF.
El resultado del
estudio fue publicado en dos ediciones especiales de la revista científica Water
International lanzadas hoy en Porto de Galinhas, municipio del estado brasileño
de Pernambuco donde hasta el próximo jueves se celebra el Congreso Mundial del
Agua.
Además del uso de las cuencas, los investigadores analizaron el
papel político en la gestión para conciliar las diferentes demandas por el uso
de agua y la necesidad de elevar la producción de alimentos para atender a una
población que aumentará de los actuales 7.000 millones a 9.500 millones en el
2050.
"Los resultados más sorprendentes nos indican que, a pesar de todas
las presiones a las que se enfrentan estas cuencas en la actualidad, sigue
habiendo oportunidades relativamente sencillas de aplicar para satisfacer
nuestras necesidades de desarrollo y aliviar la pobreza de millones de personas
sin agotar nuestro recurso natural más preciado", señaló Simon Cook,
investigador del Centro Internacional de Agricultura Tropical
(Ciat).
Cook explicó que si los Gobiernos le dieran más importancia a los
modelos agrícolas que aprovechan las lluvias sería posible aumentar "sustancial
y rápidamente" la producción de alimentos.
"Es necesaria una mentalidad
nueva en los ministerios para que se puedan aprovechar las ventajas de toda la
gama de beneficios que proceden del enfoque de cuenca de los ríos, y dejen de
centrarse simplemente en los sectores como el energético (hidroeléctrico), el
riego o la industria de manera aislada", afirma el estudio.
En la XIV
Conferencia Mundial del Agua, organizada por la Asociación Internacional de
Recursos Hídricos, participan 850 investigadores, representantes de ONGs y
funcionarios de 50 países, que discutirán experiencias exitosas en el manejo
sostenible del agua.