Gravísima situación de la Nueva Refinería Talara con argumento tendencioso de origen del problema.
Por César Gutiérrez
Se ha informado que la unidad de flexocking (FCK) estará paralizada por 90
días, que se operará al 76% de capacidad y que esta situación se inició con la
salida intempestiva del servicio del suministro eléctrico interconectado
nacional (SEIN).
Es preciso poner las cosas en contexto.
1. La salida del SEIN, que derivó en la parada total de la Nueva Refinería
Talara (NRT), es una demostración que la unidad de cogeneración eléctrica que
tiene capacidad suficiente para abastecer el 100% de la planta, no está en
funcionamiento y una vez más hay confirmación que se ha venido mintiendo a la
opinión pública diciendo que estaban operando al 100%.
2. Al no operar el FCK, la producción de residuales se incrementará al 30% de
la producción, volumen que deja pérdidas operativas, pues el producto se vende
en el mercado entre un 15% y 30% por debajo del costo del insumo y significará
caída significativa del margen de refinación, pudiendo devenir en pérdidas desde
el nivel de utilidades brutas, tal como ocurrió el 2023.
3. La paralización por 3 meses del FCK y la operación al 76% de capacidad
originará que a fines de junio de este año, la empresa tenga serias dificultades
para pagar los 170 MMUS$ por intereses de bonos, más capital e intereses del
crédito sindicado avalado por la agencia estatal CESCE.
4. Han transcurrido más de un mes desde que asumió un nuevo directorio y no
se ha escuchado propuesta alguna para ir al reflotamiento de la empresa