DEA: mayor producción de cocaína en Colombia aumenta oferta y consumo en EEUU
El aumento de la producción de cocaína en Colombia disparó la
oferta y el uso de esa droga en Estados Unidos, una tendencia que podría
continuar en ascenso y representa una creciente amenaza, reveló el martes un
informe de la DEA.
La cocaína procedente de Colombia representó un 92 por ciento
de la droga incautada en territorio estadounidense en 2016, año en el que el
área cultivada con hoja de coca en el país andino cerró en 188.000 hectáreas, un
18,2 por ciento más que en el año previo, sostuvo el estudio de la
Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA).
Mientras, la producción potencial de cocaína en Colombia se
disparó un 31,8 por ciento a 910 toneladas métricas en el 2016, año en el que
las autoridades confiscaron 323 toneladas de la droga.
"Colombia sigue siendo la principal fuente de cocaína para el
mercado estadounidense (...) las tendencias desde 2013 revelan un notable
aumento en la producción de cocaína, lo que representa una amenaza creciente
para los Estados Unidos", dijo el estudio.
El aumento de los cultivos de coca ha sido impulsado por la
disminución de la fumigación aérea con el herbicida glifosato, así como por una
menor erradicación manual, lo que provocó que la destrucción de cocales el año
pasado alcanzara su nivel más bajo desde al menos 1996.
A esa situación se sumó un incremento en los sembrados de
cocales por parte de campesinos en búsqueda de subsidios y ayudas del Gobierno
por el acuerdo de paz con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia (FARC).
"A lo largo de 2018, es probable que los Estados Unidos sigan
experimentando los niveles más altos de suministro y uso de cocaína", advirtió
el informe.
Colombia, con una posición geográfica estratégica por estar
rodeada por dos océanos, es considerada uno de los principales productores
mundiales de cocaína, actividad ilegal en la que están implicados grupos de
narcotraficantes, bandas criminales conformadas por antiguos paramilitares de
ultraderecha y la guerrilla del ELN, además de disidencias de las FARC.